violencia patriarcal

"Nos interesa solamente señalar que, cuando el poder patriarcal percibe que se problematizan las bases de su legitimación -y para ello basta que las actividades de las mujeres amenacen con tener alguna traducción en el ámbito de lo importante- responde cibernéticamente qua tale, sin demasiada sensibilidad para el hecho de que se queda ideológicamente desarmado".

C. AMORÓS

señales

Te mando señales de humo
como un fiel apache

pero no comprendes el truco

y se pierde en el aire.

Te mando la punta de un beso

que roza la tarde

y un código morse transmite

el "te quiero" de un angel

se pierde en el aire.

Te mando la luz de mis ojos

de un cuarto menguante

y un sol embriagado la eclipsa

y no puede excusarse

Que voy a hacer

inventar alfabeto en las nubes

conjugarnos al amanecer

y sentarme sobre tus pupilas

y reír o llorar mi querer

si no puedo encontrarte esta vez

Juan Luis Guerra

paranoia

Varios ejemplares de esta prole maldita, agarrándose a las ramas de detrás, treparon el árbol, desde donde empezaron a descargar sobre mi sus excrementos; mas los esquivé bastante bien pegándome fuerte contra el tronco del árbol, aunque la porquería casi me asfixia, pues caía por todas partes a mi alrededor.

Los Viajes de Gulliver, Jonathan Swift.

agotada

Ahora bien, todo lo más que puede hacer un pobre poeta es aprenderse de memoria una lista de todas las virtudes cardinales y hacer su distribución más generosa a su oyente o al padrino de su libro; disfrutará multiplicando las combinaciones hasta el límite posible y variando sus expresiones hasta apurar su vocabulario : el lector habrá hecho pronto el descubrimiento que todo aquello es siempre carne de cerdo con algún cambio en la salsa. Pues es imposible inventar términos artísticos que sobrepasen las ideas que tenemos, y cuando éstas están agotadas, los términos precisos lo están también. Jonathan Swift

libros

Los libros, como los hombres, sus autores, no tienen mas que un solo camino para ingresar en el mundo, pero tienen millares de veredas que les fuerzan a salir de él, sin que puedan volver atrás. Jonathan Swift

La medida de las cosas

Salvador Rosa, Demócrito y Protágoras.

(c. 1663-1664, St. Petersburg, The Hermitage)

la noche

Zoo de Regent's Park, 1835

Insistente

indisposición

"Pues, habiendo nacido de una madre que murió a unos pocos días de haberme traído al mundo de un mal del pulmón consecuencia de varios disgustos, heredé de ella una tos seca y una color quebrada que me duraron hasta la edad de 20 años y que incitaban a todos los médicos que me reconocieron antes de dicha edad a condenarme a una muerte prematura. Pero creo que la inclinación que tengo de mirar cuantas cosas se me presentan bajo el aspecto que puede tornármelas más gratas y de hacer que mi principal contento no dependa sino de mí mismo fue la causa de que esta indisposición, que era en mí algo natural, se atenuara poco a poco hasta desaparecer por completo". Carta de De Descartes a la Reina Isabel. Mayo o Junio de 1645.

luminosa

Los cuerpos luminosos no poseen ninguna cualidad luminosa en sí misma.

emana

"Ahora bien, existen tantas cosas en la propia mente mediante las cuales se puede percibir con mayor claridad su naturaleza, que todo lo que emana del cuerpo apenas parece digno de mencionarse". Descartes

ventolera

El viento da en el rostro; 

luego el aire es un cuerpo, 

un fluido que se siente, 

aunque no se pueda hacer visible. 

J.J. Rousseau

nudo

Padezco el cuerpo que escribo. 

(El nudo de esta tesis)

tensión

"Hay pues experiencias que no nos pertenecen, a las que no podemos llamar 'nuestras', pero que justamente por eso, 

porque son experiencias de lo inexperimentable, constituyen el límite último que puede alcanzar nuestra experiencia en su tensión hacia la muerte".

Giorgio Agamben, Infancia e Historia. 

de espaldas

Sólo puedo trabajar de noche. Ese es un gran problema: los horarios, las temperaturas, la loza que se acumula, el aseo, ir donde mi abuela a lavar la ropa sucia. Llegan las 11 p.m. y recién la ciudad se calma. El cerro se prende y hay silencio, la gente se guarda, el pasillo del edificio desaparece. No hay más ruidos fuera de mi. Cambié incluso la orientación del escritorio. Ahora, escribo de espaldas al pasillo; sólo nos separa una ventana sin cortinas. Quien entre o salga de este piso me verá escribiendo, puede compartir conmigo estas palabras.

tonos

"...todos los toques infinitamente multiplicados, 

todos los tonos proliferando"

Jean Luc Nancy, Corpus. 

después

He pensado en qué diablos se hace después que uno sale de la Universidad. Pienso que debiese seguir estudiando. Probablemente haga eso. Pienso en que finalmente el título que un(a) humanista obtenga en Chile, es el certificado del eterno derrotista. «He visto a las mejores mentes de mi generación destruidas por la locura» escribió Ginsberg, en cambio, yo sólo he visto caer a las mejores. Caída que no es locura sino que es exceso de utilidad, de integración salvaje. Caer en la medida en que se vuelven adultos, en que pierden las ganas de seguir intentándolo, de superar los obstáculos -que prácticamente han debido sortear toda la vida. Nadie dijo que vivir fuese fácil. Pero tampoco, nadie dijo que vivir con los ojos abiertos lo hiciese aún mas difícil.

tesis

Actualmente investigo sobre Jonathan Swift, en específico, sobre "Los Viajes de Gulliver". Es una satira política tremenda, larguísima, contundente, elucubrada, hiper trabajada. Por supuesto que es mucho mas que las películas. Me centro en aquello que pudiese ser designado como lo "pseudo-hombre" o que está en "proyecto de hombre", considerándose éste último como especie, no como género. Eso que habita (y que nos hace habitar el mundo) como "infra-humano". Decidí centrarme en ese tema porque por ese filtro puedo ver no sólo horizontes o ideas sobre lo humano, sino que además puedo leer aquello que a lo largo de la historia de la literatura ha sido siempre inscrito como aquello que no: la mujer, los niños, los animales / las bestias, los locos, etc. Definitivamente esta tesis está inscrita en lo que se llamaría desde la Academia como Antropología Filosofica. Así termino mi carrera justo y como la comencé: leyendo ficción y escribiendo filosofía. Una vez un profesor del Arcis, Iván Trujillo, me dijo eso: "El filosofía uno comienza y termina donde mismo: no hay nada que aprender". A veces, tiene razón.

He estado leyendo mucho, desde Isaac Newton hasta Hannah Arendt, haciendo unas interpretaciones que - a menudo- me sorprenden a mi misma, pero que mediante la escritura adquieren espacio, adquieren geografía. Las figuras y/o conceptos de "miniatura", "infante" y "animal" es en lo que más he invertido tiempo; esto respondiendo a una pregunta que pareciese casual, pero que no lo es: "¿Por qué un libro como éste es leído principalmente por niños?". Es una pregunta que hizo el Profesor Pablo Oyarzún y que es mi horizonte de trabajo. 

Estoy nerviosa, porque los borradores de citas pareciesen nunca terminar. Por suerte cerraron las Bibliotecas en la Universidad, sino estaría otro año trabajando. Mis amigos me dicen que se me está saliendo de las manos el tema de las lecturas, las citas, la discusión bibliográfica, pero no conozco otro modo de trabajo que el caos. Siempre he trabajado así. Lidio conmigo misma: con mi experiencia lectora y escritural, con mi cuerpo, con mi biografía estudiantil. No concibo escribir una tesis cruzada por el cuerpo, sin ponerlo en juego. Eso me da miedo, principalmente porque una tesis de filosofía debiese ser exactamente lo opuesto, algo mucho mas "claro y distinto". En fin. Haré lo que mejor sé hacer: escribir.

cerrar y abrir

Siempre que vuelvo a publicar en el blog pretendo hacerlo continuamente. Veamos como me va esta vez. Quiero usarlo como blog y nada mas.

Y... cerré Facebook. Es una novedad a medias, porque ya todos mis cercanos lo han notado y es bonito ver que me llaman, me escriben correos o -de plano- me dicen con tono amenazante "¡Me eliminaste de Facebook!". Al final uno lo pasa pésimo viendo fotos de viajes de amigos (viajes que una no puede hacer), chusmeando leseras y exponiéndose a cualquier clase de insulto.

Igual Facebook me sirvió ene, sobretodo para re-encontrarme con gente, pero también para (terminar de) decepcionarme de ella. Onda el típico niño que me gustaba de pendeja, ahora convertido en todo un zorron-papi-chulo-pior o el hdp con el que una tuvo historia y ahora se acuerda porque dejó de verlo.

Luego de cerrarlo, sufrí los dos primeros dias de "tiempo de sobra" frente al computador. Una cosa como "¿Y ahora qué hago?". Pero ahí está lo bueno, ahora leo mucho mas, ando en bici como loca, cosas así. Era algo que estaba buscando para por fin acabar el grueso de mi tesis. Recomiendo 100% bajarse de Facebook. No se puede trabajar como la gente y tener esa tentación voyeur latente. Esa es una razón de peso. Quizá lo retome después, cuando sobre tiempo para la vida.